viernes, 18 de julio de 2008

Ja, ja, ja

Tengo un problema con las nuevas tecnologías. Bueno en realidad tengo varios. El último con el que me he topado habita en los chats, facebooks, messengers y programas de la misma calaña. Me he dando cuenta de que me he hecho algo mayor, ya que hay partes de las conversaciones que se entablan con estos inventos del diablo que se me escapan. No es sólo cuestión de que los 'emoticonos' (pongo la comilla simple con la poca vergüenza que me queda) me resbalen. No es que no sepa como decorar mis mensajes con tormentas de bits de colores y sonidos ajustados al sistema.

No. Es que no sé reírme por internet. Los mensajes que llegan están llenos de carcajadas que no entiendo. Me siento absurdo escribiendo ja, ja, ja. Tampoco en Navidad me saldrá el ho, ho, ho. Así escrito. Tan estéril. Tan frío. Es como querer cambiar un beso pasional por un muacks. Incluso peor.

Cuando alguien río de verdad lo hace con toda la cara, casi con el cuerpo al completo. Lo de menos es el sonido que sale de los labios. Cuando alguien ríe de verdad llena los ojos de infancia o de picardía. Y gana un par de minutos de vida de esos que perdió con el trabajo y los excesos. Así que cada vez que escribo un ja, ja, ja me siento un poco un impostor. Como un redactor de Economía que no sabe de economía o un profesor del latín que no pasó del rosae.

Ya ven, sólo es una limitación más que llevarme a la mochila. Je.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

SÍ, EN DEMASIADAS OCASIONES, LAS NUEVAS TECNOLOGÍAS TE HACEN SENTIR ESTÚPIDO.

Por cierto, mucho mejor el diseño de tu blog. Etapa nueva, apariencia nueva?

RMendoza

El Gato dijo...

Parece mentira que eso lo diga alguien como tú, que sabe reírse con ese ja, ja, ja de cabroncete en las situaciones más dispares...

Juanjo Marcos dijo...

Ahora es que me doy al diseño urbano, Mendoza.

Por cierto, minino, yo sólo río con inteligencia, a los chistes elevados, nada de carcajadas cabroncetas.