domingo, 14 de junio de 2009

Cañas por España

No es que vaya a hacerse en este rincón una antología de lo etílico, ni una loa al chuzo y tente tieso. Sin embargo hace muchos años ya me avisaron que una crisis es de verdad gorda (de esas que retrotraen la memoria a Chicago años 30) cuando se renuncia a las cosas de comer. Y del beber, claro. Si en un país como España, con toda esa herencia haragana a sus espaldas, renuncia a las cañitas del mediodía y al cubateo de por la noche, sólo hay dos opciones. O nos estamos modernizando o nos estamos deprimiendo. Como no fumo brotes verdes de esos buenos que distribuye Salgado, opto por lo segundo. Así que, por patriotismo -y por favor-, salgan ustedes a los bares a ver si levantamos esto. Las crisis son épocas de heroicidades.


Los españoles toman menos cañas
Lo reflejan los datos de 2008 que arrojan una caída en el consumo del 6% y de la producción en un 2,7%. Sector y Gobierno apuntan a la estacionalidad como uno de sus handicaps. Mientras, el primer trimestre de 2009 apunta un descenso del 10%.
Concebir el aperitivo de mediodía sin una caña es algo que, en España, es imposible. Y a pesar de ello, la crisis ha hecho mella, aunque moderadamente, en el sector cervecero que ha visto caer su producción en un 2,7 por ciento en 2008, "el primer descenso desde 1996".


Las ventas de Coca Cola caen un 10% por el desplome del consumo de cubatas
Madrid.- La crisis económica no perdona a nadie ni siquiera a la reina mundial de las bebidas refrescantes. Las ventas de Coca Cola en los bares y restaurantes españoles caen un 10% este año, según reconoce la propia compañía. Este descenso está ocasionado, además de por la menor actividad en los establecimientos de restauración, por la fuerte caída del consumo de cubatas.
"Supongo que la gente sale menos que antes. Va menos a los bares y restaurantes", ha argumentado el presidente de Coca Cola para España y Portugal, Marcos de Quinto, quien precisa que pese a la caída de las ventas en el canal Horeca (hoteles, restaurantes, bares y cafeterías), los ingresos procedentes de tiendas y supermercados se mantienen estables.
En los 243.000 bares que hay a lo largo y ancho de la geografía española –uno por cada 190 habitantes–, el refresco de cola es la base de más del 90% de las copas de trago largo, ya sea mezclado con ron –el legendario Cubalibre–, whisky, vodka o ginebra.